El Consejo de la Unión Europea ha confirmado recientemente el acuerdo provisional alcanzado con el Parlamento Europeo sobre la revisión de la Directiva sobre energías renovables (RED II).
El acuerdo provisional alcanzado el 13 de junio fue respaldado por los embajadores de la UE (Consejo) el 27 de junio.
El acuerdo final es más ambicioso que la propuesta original de la Comisión que aborda también muchos desafíos clave del sector del biogás.
Los Estados miembros deberán alcanzar el 32% de energías renovables en el consumo final de energía para 2030, en lugar del 27% inicial que la Comisión presentó en noviembre.
Durante este período, los países de la UE también deberían aumentar la proporción de Energías renovables suministradas para calefacción y refrigeración en un 1,3% anual.
En el sector del transporte, se solicita a los proveedores de combustible que aseguren una participación del 14% en el consumo final, también para 2030.
Además de los objetivos, RED II ha proporcionado aclaraciones sobre el concepto de energía renovable en sí.
Redefine lo que puede considerarse una fuente de energía renovable o un biocombustible y proporciona más explicaciones relacionadas con la producción de biogás y biomasa.
Este documento vinculante establece también nuevas condiciones para la implementación del mercado de gas de la UE, en particular en relación con los planes de apoyo, los mecanismos de cooperación, las garantías de origen y las conexiones a la red.
Los aspectos relacionados con los criterios de sostenibilidad y el sector del transporte abordado también tienen un impacto clave en el uso de biogás y biometano.
Una de las consecuencias de la nueva Directiva es que los agricultores de toda Europa podrán utilizar las deyecciones ganaderas para la producción de biogás. “El RED2 finalmente reconoce que el estiércol tratado en la digestión anaerobia no solo tiene un efecto positivo de CO2 en lo que respecta a la energía producida, sino que también tiene en cuenta que el estiércol no tratado emite metano durante el almacenamiento abierto de las deyecciones“.
Las deyecciones no tratadas emite metano durante el almacenamiento abierto.
Las digeridas tienen un impacto positivo en el CO2.
Esto tan sencillo, implica que los ganaderos que tengan planta de biogás, en un futuro cercano, de alguna forma verán premiada su reducción de emisiones. Y las explotaciones que no tengan planta de biogás perderán competitividad.
Para que comprendamos la importancia del tema, la ganadería en España es responsables del 12 % de las emisiones de gases de efecto invernadero. La generación de energía eléctrica es un 17 %. Pero si seguimos así en unos años las emisiones de la ganadería superará a la generación de energía eléctrica.
La ganadería en España es responsables del 12 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los países donde la digestión anaeróbica en el sector ganadero esté más desarrollada (Italia, Francia, UK, Alemania, Holanda, Bélgica, Austria, Suecia, Noruega ….), tendrán una ventaja competitiva con respecto a los ganaderos Españoles. (A no ser que el sector ganadero y el gobierno se sienten para encontrar una solución)